Este se levantó e hirió a los filisteos hasta que su mano se cansó, y quedó pegada su mano a la espada. Aquel dia Jehová dio una gran victoria, y se volvió el pueblo en pos de él tan solo para recoger el botín. (2 Samuel 23:10)
Eleazar, hijo de Dodo, uno de los tres valientes del rey David que se quedaron a luchar cuando el pueblo de israel se alejó de la batalla. Este fue uno de los valientes que peleó contra los filisteos, hasta que su mano se cansó y quedó pegada su mano a la espada. y que aquel dia Jehová dio una gran victoria. ¿Qué nos enseña estos textos? Así como este valiente de David, que no dejo de pelear contra los filisteos. Deberiamos ser valientes en Cristo. No abadonar el camino que el Señor nos ha enseñado en su grande misericordia. Los filisteos de nuestras vidas son espirituales, morales y hasta mentales. Debemos luchar como este valiente que peleó hasta que su mano se cansó y la espada se pegó en su mano. Asi sea nuestra lucha combatiendo al enemigo, en base de su palabra, hasta que la palabra se pegue en nosotros. Cansarnos no significa abandonar la batalla. porque no luchamos solos sino que Dios en nosotros produce ese poder. como dice la palabra de Dios. Pero tenemos este tesoro en vaso de barro para que la excelencia del poder sea de Dios y no de nosotros.La excelencia del triunfo es de Dios y no de nosotros nosotros, sin Cristo no podriamos vencer a estos filisteos, sin embargo podemos hacerlo porque el Espiritu de Dios mora en cada creyente. Y si no eres de Cristo o no lo has recibido puedes hacerlo para que te ayude a vencer a los filesteos de tu vida. Y luego podremos testificar de la victoria alcanzada. Amén,Amén. 2 sam. 23:10 .
Dios las bendiga y las ayude a vencer a los filesteos de sus vida.
De: Lusbinda Florian
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